Queridos Reyes Magos:
Una, que es republicana de toda la vida pero que, como humana y contradictoria que soy, siempre he creído en Sus Majestades, sin tener muy claro mi buen comportamiento en el año aciago de 2013, no me resisto a escribirles esta carta en donde les pido, no exactamente para mí, sino para estos señores que nos desgobiernan.
Empiezo:
Al señor Rajoy, nuestro ínclito Presidente, una televisión de plasma que lo absorba como a la niña de Poltergeist, para que así tenga una buena excusa cuando se vea “obligado” a comparecer ante los medios para dar alguna “explicación”.
A la señora Sáenz de Santamaría, su segunda de a bordo, y especialista en “tirar balones fuera”, un gramófono de la marca “La voz de su amo”.
A la señora Báñez un altar con muchas peanas, porque no le va a bastar solo con la Virgen del Rocío, a pesar de las “filtraciones” arriesgadas (¡Pecado, pecado!)
Al señor Fernández Díaz, unas concertinas pret a porter para que las luzca en sus tan acertadas intervenciones, y una cacheo a fondo por cualquier Seguritas.
A los señores Soria y Arias Cañete unos hilillos de plastilina en estiramiento vertical, horizontal y en espiral para que los envuelvan bien, acompañados de algún que otro apagón sin subida manipulada de tarifa.
A la señora Mato, una lista de espera que dé la vuelta a la muralla china y en la que ella sea la última. Así le dará tiempo de contemplar el paisaje e igual llega a tiempo para sus cuidados geriátricos, previo copago, claro.
Al señor Morenés (¡De frente, mar… chando una de expedientes para la capitana que denunció a un coronel por acoso- hasta ahí podíamos llegar!), una reconversión a cabo corneta.
Al señor Montoro un juego de “Hacienda no somos todos” y otro de “Amagar y (no) dar” para que se dirija, con todas las de ganar (impuestos) a periodistas, gente de la cultura y demás desaprensivos.
Al señor de Guindos un CD con las canciones: ¡Estamos saliendo!, ¡Toda marcha bien! y Ahora que vamos despacio, vamos a contar mentiras, tralará.
A la señora Pastor, un aeromodelo de radio control para que aterrice en esos aeropuertos peatonales, acompañado de la película ¡Aterriza como puedas!
Al señor Margallo, después de que se le encuentre, un viaje a Panamá con visita especial a las obras del Canal, acompañado por uno de los jefazos de la sin par Sacyr.
Y por último y no por ello con menos ganas, al contrario, para los señores Wert y Gallardón, que tanto han hecho por la Conferencia Episcopal Española y que le han regalado a Rouco Varela, ¿Cómo despedida?, una LOMCE segregadora, nacional católica, apostólica y demás, y una ley del No aborto (a no ser que tengas pasta gansa y si no ¡ a jod…perdón por el inicio del taco, Majestades), una máquina del tiempo que los traslade a los años- vamos a no irnos muy lejos- pongamos que 50, para que se queden allí. ¡Verán cómo disfrutan con el dictador bajito!
Y si nada de esto es posible ¿qué tal un cambio de muchachada pepera?
Sí, ya sé que la cosa está difícil pero, por ahora (porque después nunca se sabe, dada esta situación de apaga y vámonos) soñar no cuesta dinero.
Atentamente
P.D. Se habrán dado cuenta de que la copa de cava es más pequeña y la leche para los camellos es de soja. No es solo por la crisis, que también, sino porque es mucho más sano y, además, no quiero que por mi culpa sobrepasen el nivel de alcohol en los controles y después tengan que recoger firmas para un indulto.
Otra cosa: lo del carbón, que ya lo tengo asumido, a ver si este año es de más calidad porque el del anterior no prendía ni poniéndole delante una foto de Sánchez Dragó.
